Me encuentro con mucha frecuencia a personas que dicen «Si yo no soy nada creativo». Es una respuesta habitual sobre todo cuando se trata de buscar formas de promocionar la empresa, de emitir mensajes en redes sociales que no sean meros folletos publicitarios. Sin embargo, luego lo hacen bien.

Muchas veces cuando pensamos en creatividad pensamos en pintura, escultura, música… Y no nos paramos a pensar en que la creatividad es algo muy propio del ser humano. Para ser creativos no hay nada como querer serlo. Lo diremos de otra forma, para ser creativo no hay como tener una meta, un objetivo. Uno que deseemos y nos motive, a partir de ahí movemos cielo y tierra para llegar a él. Nos la ingeniamos como sea para lograrlo. Eso es creatividad.

La mayoría de las veces que decimos, es que no soy creativo, en realidad nos ponemos excusas. No se trata de convertirse en el nuevo Picasso o el nuevo Paco de Lucía (o sí, si te atrae). Se trata de tener claras las metas. Se trata de tener claro lo que queremos, que nos guste y moverse para conseguirlo.