
En este mismo blog y también en Neuropymes (libro), lo hemos hablado muchas veces. Para hacer vivir, para que el cliente experimente, sienta, nada mejor como hacerlo a través de personas.
Tenemos a nuestra disposición cinco sentidos y un montón de herramientas. Podemos decorar salas de ventas en función de lo que queramos hacerle sentir al cliente. Podemos añadirle música, aromas. Podemos tener una imagen fantástica que cuando el cliente la vea automáticamente "recuerde" sensaciones, sienta......