Sin método no hay creación
“Si me pagaran por tener ideas sería millonario”, frase que hemos escuchado todos y seguramente más de una vez. ¿Cuál es la diferencia entre el que tiene una idea y el que triunfa con ella? Que el segundo la lleva a cabo y el primero no.
Imaginar las cosas es mucho más fácil que llevarlas a cabo y cuando estás intentando llevar a la realidad eso que has creado te encuentras con obstáculos que no habías tenido en cuenta.
¿Quieres llevar a la práctica las ideas que tienes? Necesitas ser metódico y dedicar tiempo a crear, no solo a imaginar. Cuando las ideas aparecen hay que desarrollarlas, pero para eso nunca “se tiene tiempo”… salvo que dejes periódicamente un hueco para el desarrollo de nuevas ideas que se te han ocurrido. Decía Picasso aquello de que “cuando llegue la inspiración, me encuentre trabajando”. Y trabajar en una idea es crear un plan para desarrollarla y llevarla a la realidad, sin olvidarse de pensar en cómo ganar dinero con ella si lo que tienes entre manos es un proyecto empresarial. El problema de muchas startups que fracasan es no haber pensado por qué habría de pagarme alguien por esto.