Sois muchos los que me decís: Esto de la experiencia corporativa está muy bien, pero qué ocurre cuando vendes muchos productos diferentes y de muchas marcas.

Hay que distinguir entre la experiencia corporativa de tu empresa, por tanto, de tu marca y la marca de los productos que vendes. Mercadona, por ejemplo, vende productos de muchos fabricantes, unos con enseña propia y otros no. Sin embargo, en todos los supermercados Mercadona se experimenta la misma experiencia.

Tampoco hace falta que tengas más de un punto de venta para que gestiones la experiencia corporativa. Puedes hacerlo con un un solo establecimiento, incluso sin él. Si eres comercial y representas a varios fabricantes, puedes hacer, también, que tu cliente viva una experiencia corporativa. En este último caso, si no recibes a los clientes en un sitio físico, no considerarás la estancia corporativa como un elemento de la experiencia, puesto que no existe. Pero el resto sí. Tu marca, es tu marca personal.

Tenemos que pensar que ya hacemos sentir cosas al clientes. Con lo que decimos y con lo que no decirmos con palabras, con nuestra forma de tratar y trabajar con el cliente, ya le estamos haciendo sentir cosas. La cuestión es que eso que el cliente siente lo dejemos al azar o tratemos de hacerle sentir cosas que nos puedan ayudar en la venta y en la fidelización.

Si no quieres estar en manos del azar, no lo dudes: Experiencia corporativa.