
Es curioso cómo defendemos, yo el primero, que conste, procedimentar todo en las empresas. Es la única manera en la que haya quien haya, la empresa siga siempre su curso normal. La actividad no debe verse interrumpida porque llega alguien nuevo. Lo que ocurre, es que como en todo, los excesos no son buenos.
Claro está, es imprescindible revisar esos procedimientos para no volvernos sus esclavos, sino que sean las rutinas las que trabajen para la...