Los riesgos de los ecommerces que se gestionan solos
Moisés, un emprendedor de Lima (Perú) que está deseando arrancar un negocio me hace una consulta que me ha parecido interesante compartirla con vosotros.
Moisés no sabe bien qué negocio emprender, aunque sí que tiene claro que será una tienda online. Me pregunta qué me parece la idea de montar una tienda virtual que venda productos de terceros, de forma que su web se alimente directamente de las tiendas online de sus proveedores y ellos mismos sean los que las gestionen. De esta forma, su ecommerce aplicaría un margen al coste del proveedor y el propio proveedor es el que envía la mercancía.
Bien Moisés, esta práctica es muy, muy habitual en tiendas online. La tienda vende, pero no gestiona ni pedidos, ni siquiera la logística. Simplemente vende. Así, se consigue montar un negocio con muy poco esfuerzo. Este tipo de negocio, en mi opinión, tiene dos debilidades importantes que deberías analizar detenidamente.
La primera: La diferencia entre tu tienda y otra que tenga el mismo proveedor es solo el precio y el posicionamiento de la web. No puedes diferenciarte en otra cosa, puesto que lo único sobre lo que tienes control es sobre estos dos aspectos. Ni siquiera puedes elegir la agencia por la que envías el pedido, todo lo hace el proveedor. Por lo tanto, un negocio de este tipo debe posicionarse muy bien para que tu opción aparezca primero en buscadores. Cosa que también sabe tu competencia y también intentará estar encima. Y cuidado, porque puede que tu competencia sea tu propio proveedor, entonces difícilmente podrás competir en alguno de los aspectos indicados.
El segundo punto importante es que los proveedores, conscientes de que ellos hacen todo el trabajo, aplican márgenes a sus precios que dejan muy reducido el tuyo. Con lo cual para ganar algo tendrás que vender mucho y volvemos al punto primero. Para ganar mucho necesitas buen posicionamiento, pero tienes poco margen y, por tanto, pocos recursos para invertir en posicionamiento. Así que salvo que seas experto en SEO y no tengas que subcontratar ese servicio, tendrás pocos recursos para invertir.
En este tipo de webs, a efectos prácticos, eres un comisionista. No tienes control alguno sobre el producto. Está muy bien como negocio adicional a otra actividad, pues no te ocupa tiempo la gestión de los pedidos, pero como actividad principal necesitarás muchas tiendas diferentes para poder obtener un beneficio decente. Aunque, claro está, eso dependerá del margen que te deje tu proveedor.