Asistir a eventos como este es un verdadero placer. Por la seriedad de la organización, por el nivel de las ponencias y por el de la gente que asiste.

Descubriendo tendencias, anticipando el futuro ha sido el lema este año y lo han hecho Andy Stalman, José Mª O´Kean, Hugo Rovira, Carina Spilka y Mago More. Con una mesa de reflexión sobre la empresa familiar integrada por Cosentino, Ayesa y Osborne.

En qué consiste ese anticipo del futuro que hicieron los ponentes. Trataré de resumirlo en pocas líneas. Se terminó hace tiempo la era de las empresas deshumanizadas con canales de comunicación unidireccionales en las que la empresas dicen y los clientes oyen. La «batalla» se juega ahora en un espacio de diálogo en el que hablar al cliente de tú a tú implica necesariamente ser «empresas humanas». Hablar de tú a tú… Y yo añadiría hacer crecer al cliente para crecer como empresas.

Ese espacio de diálogo es lo que algunos llaman «mundo digital». Estoy muy de acuerdo con Carina Spilka cuando dice que no existe un mundo digital, un mundo offline y otro online. Existe un mundo, punto. Lo demás son diferentes herramientas que las personas usamos para relacionarnos. Las empresas, como grupos que son de personas, también. Las empresas ya no libran una guerra comunicando, sino que establecen relaciones relacionándose con los clientes. Las empresas son habitantes del planeta y por tanto tienen el mismo grado de responsabilidad con su entorno y con la sociedad que cualquier individuo.

Finales como el que nos brindó Mago More o lo que vimos en la mesa de reflexión, nos recuerda que sin pasión no hay empresa. Casi que diría que sin pasión no hay vida, puesto que alguien desmotivado nunca llega a ninguna parte y si por casualidad llega tampoco se da cuenta de ello.

Hablamos de nuevos retos, del desafío de esta revolución que estamos viviendo en los últimos años, pero a veces las cosas son más fáciles de lo que parecen. Ahora es mas fácil que nunca. Tenemos herramientas, además prácticamente sin coste. Tenemos nuevas reglas del juego, pero igualan las condiciones entre grandes y pequeñas empresas. Ya no se trata de grandes desafíos, sino de pequeños día a día en el que la clave está en relacionarnos empresas y clientes como lo hacemos a diario personas y personas.

Foto: Vidaeconomica.com